Beals Lyon Arquitectos es la oficina de arquitectura creada por Alejandro Beals y Loreto Lyon, en la cual buscan realizar una arquitectura, que es entendida como la generación de una serie de experiencias y situaciones para ser percibidas por los sentidos. En ese sentido, sus proyectos buscan hacer difusos los límites entre lo construido y el paisaje, creando nuevas relaciones entre el cuerpo y lo construido.
Su oficina la fueron formando, en paralelo al trabajo que desarrollaron durante años, en las oficinas de Mathias Klotz y Smiljan Radic, y con el cual incluso, siguen desarrollando proyectos hasta el día de hoy, lo que les ha significado adquirir gran experiencia y nuevos conocimientos.
La oficina Beals Lyon Arquitectos tomó forma concreta en el año 2007, en la medida en que surgieron los primeros encargos privados, que desarrollaron y construyeron, antes partir en 2009 a Londres. En esa ciudad Loreto realizó un Postgrado en Sustentabilidad en la Barlett School of Architecture y Alejandro un Master en el Royal College of Arts, lo que les permitió investigar temas propios, que ya habían trabajado en sus primeros proyectos.
La experiencia de estudiar y vivir en Londres, marca un antes y un después en el ejercicio profesional de los arquitectos, ya que les permitió hacer un paréntesis en su ejercicio profesional, y “nos pudimos volcar a la investigación, que nos permitió, decantar, precisar y madurar los temas e inquietudes que veníamos trabajando, pero en medio de un ambiente creativo heterogéneo y multidisciplinario” dice Alejandro.
El trabajo de los arquitectos, “se ha caracterizado por entender que la arquitectura no es la creación de un objeto visual, como podría sugerirnos el movimiento moderno, sino que es más bien la generación de una serie de experiencias, con las cuales buscamos poner al cuerpo y a los sentidos en relación directa con lo construido” señala Loreto.
En ese sentido los espacios construidos sugieren una serie de situaciones más o menos difusas y ambiguas, que buscan crear en la persona una pausa, un “estar lento” que le permite agudizar sus sentidos.
La Casa en el Lago Rupanco (2006) fue el primer encargo de la oficina (que realizaron junto a Christian Beals) y para la cual buscaron mimetizar la nueva construcción, con el entorno boscoso que la rodea. Debido a que contaban con una mano de obra que sólo dominaba la construcción en madera, optaron por trabajar con los sistemas constructivos propios del lugar, lo que les permitió insertar este proyecto en un imaginario propio de las construcciones de la zona.
Mientras que para revestir el exterior de los volúmenes paralelos, emplearon pino teñido con carbonileo, en el interior de ambos cuerpos, usaron madera de ulmo y mañío, que dejaron al natural, para aportar mayor calidez a los espacios.
La Casa para dos golfistas (2008), localizada en Marbella, logra crear una gran sombra difusa entre los volúmenes que contienen los programas más privados.
Para lograr fusionar el interior y el exterior, emplearon un envigado de madera continuo, que sostiene la cubierta y construye esta sombra sobre el estar y la terraza, generando nuevas relaciones entre los espacios público, que quedan entre la cancha de golf y el patio de acceso a la casa.
En las Cámaras Frigoríficas (2008), ubicadas en Los Ángeles, buscaron generar una unidad del nuevo proyecto, con los elementos existentes en el conjunto, a partir del uso de los mismos materiales y paletas de colores.
En ese sentido, propusieron un primer estrato de ladrillo pintado blanco, sobre el cual colocaron los paneles metálicos ventilados, de color negro, que permiten lograr que el proyecto desaparezca en relación con su entorno. Además aprovecharon de construir un espacio intermedio entre el muro de ladrillos, a modo de celosía, y las oficinas de los operarios, logrando iluminar y ventilar de manera natural.
Recientemente acaban de obtener el primer lugar en el concurso YAP_Constructo 2012, instancia internacional patrocinada por el MoMA NY, para realizar un pabellón de verano en el Parque Araucano de Santiago, durante el verano de 2013. Su proyecto, “El jardín de los senderos que se bifurcan”, es la construcción de una serie de experiencias sensoriales, en medio de la naturaleza, y que alejan a los habitantes de la ciudad.
Los usuarios irán recorriendo un laberinto, creado medio de un campo de choclos, en el que encontrarán una serie de lugares memorables, donde se generarán interacciones con los sentidos, exaltando olores, sonidos y percepciones notables.
Actualmente la oficina se encuentra trabajando en el desarrollo de una Iglesia en la localidad de Almahue (VI Región) y que fue destruida por el terremoto. El proyecto, es la construcción de un volumen, entre dos patios, que buscan construir una nueva distancia con el entorno, y colocar al cuerpo en una situación de lentitud, a partir de una atmósfera interior de penumbra.
Además se encuentran realizando dos casas en Huentelauquén (IV Región) y las nuevas oficinas y comedores para una viña, siempre teniendo en cuenta la necesidad de generar una investigación con cada proyecto, donde más que imponer respuestas, buscan plantear nuevas preguntas.
Obras de Beals Lyon Arquitectos publicadas en Plataforma Arquitectura
1. Casa Lago Rupanco 2. El jardín de los senderos que se bifurcan
